5 may 2014

Puente de pesca

Para despedirme de mi tierra, mis pantanos y ríos y de mi equipo de pesca para estos dos largos meses que me quedan en Huelva  decidí alejarme de las fiestas y bares durante este puente para disfrutar de una de mis mayores aficiones, la PESCA.


He compartido entornos muy diferentes y he disfrutado en mayor o menor medida en todos ellos.


El jueves decidimos ir a un embalse cercano que todavía no había pescado, en esta ocasión usamos equipos para pescar al lanzado y como no mi cola de rata no podía faltar tampoco, fuimos Juanlu, Ana, Jesús, Ángel y yo. Aproximadamente una después de comenzar tuve la primera picada, la cual falle con un error de novato y al poco Juanlu tuvo otra que tampoco pudo clavar. Yo eso de pescar sentado no lo llevo muy bien y entre las cañas me puse a realizar algunos lances con una pequeña hormiga  con la que se dejaron engañar algunos percasoles y en uno de estos lances escucho algo, mi carrete soltaba hilo a toda velocidad, una carrera a la caña y ZASS!! Esta no podía dejarla escapar y tras unos minutos de lucha conseguí sacar mi récord en carpa, una bonita royal de 5 kilitos.




El viernes me tocó madrugar y sacar a pasear la caña de mosca, la mañana estuvo entretenida, pude sacar algunos pequeños barbos y  alguna carpita.


El sábado tacaba pisar los grandes pantanos, nos fuimos Pozo, mi tío Jose y un servidor para patearnos tanto la Serena, Orellana y el Zujar, fue un día un tanto aburrido, pero todos evitamos ese temido “bolo”.





















Ahora solo me queda esperar que estos dos meses pasen rápido y volver a mi EXTREMADURA, con mi gente, mis amigos y como no seguir disfrutando de la pesca.

11 abr 2014

No siempre hace falta pescar para disfrutar

Hoy por fin llego ese día que tanto estaba esperando, el día en que volvía a montar mi equipo de mosca, y ¿qué mejor forma de quitarle el polvo que intentando engañar a esos apasionantes barbos gitanos y disfrutar de unas buenas vistas?

Desgraciadamente en esta salida no pude tocar escama, pero eso no quita que haya sido unos de los días en que más he disfrutado en el río, únicamente fui capaz de clavar un bonito ejemplar de barbo gitano, el cual pegó una bestial arrancada a favor de corriente y a la vez que sacaba línea del carrete yo seguía su trayectoria con la vista y ZAS!! Sale una cigüeña negra a unos escasos 30 metros de mí. Finalmente cuando creo tener ya al pez vencido vuelve a meter una fuerte arrancada en la que me parte el bajo.


Pero esto no termina aquí, después de andar apenas un kilómetro más me paro a cambiar la mosca y me llama la atención en el agua unas burbujas que salen a la superficie y se me acercan poco a poco, y menuda sorpresa me llevo cuando consigo ver que producían esas burbujas, a menos de un metro ¡sale a la superficie una nutria!, la cual al verme busca la orilla contraria y se pierde entre la vegetación.